SOBRE LA ACCIÓN DE HACER O NO HACER

Creemos que es necesario hacer mucho.
Es un error, lo importante es hacer lo justo.
Ser justo.
Hacer cuando la vida pide que hagamos.
No hacer nada cuando la vida pide que no hagamos nada.
Esto parce sencillo y lo es; pero es poco-facil de conseguir.
Requiere humildad.
Es bueno hacer lo que hay que hacer cuando se ha hecho
Hacer antes es demasiado pronto.
Hacer después, es demasiado tarde.
Hay que aprender a armonizarse con el reloj del Tiempo cósmico.
Cualquier cosa que hayamos hecho, no es nada.
Lo que es importante no es lo que hemos hecho sino lo que queda por hacer.
Nunca habremos acabado.
Siempre hay que volver a empezar, intentando cada vez ser mas puro.
Conservar el espírito intacto como el recién nacido, fresco como el día que nace.
Cuando no hay nada que hacer el espíritu puede agitarse, rebelarse, pues el ego no está agusto.
No moverse.
Quedarse enfrente.
Entonces podemos tener acceso a una verdad más profunda de nosotros mismos.
Sólo hay una cosa por hacer cuando todo ha sido hecho en el orden de lo cotidiano terrestre: es sumergirse en el sIlencio interior.
Allí nos espera otro mundo, de otra geografía, de otro ritmo de tiempo.
Es , en cierto modo, dejarse morir conscientemente, desaparecer Siendo.
Aquietarse estando presente.


MADRID 16 AGISTO 2012



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