martes, 17 de julio de 2012

ABRIRSE A ESCUCHAR

Parece ser indiscutible que la mejor manera de aprender algo es por medio de la experiencia personal, pero hoy en día podemos aprender de otras maneras también.
Apredemos de los demás, porque estamos dispuestos a abrir nuestra mente y escuchar ,¿No es cierto?... Y cuando nos abrimos a ello, y no nos encerramos en "nuetra cueva oscura" aprendemos de nuestro sentido común y de nuestra propia intuición.
Cuando nos abrimos a escuchar todos somos buenos estudiantes ,sea cual sea la lección , y no le ponemos pegas.
Algunas veces nos hemos resisitido a atender razones, incluso rozando la terquedad , y si nos indicaban un camino o una determinada senda nos hemos rebelado y justo hacia ella hemos dirigido nustros pasos .
El ego personal nos traía todas las respuetas , o eso creíamos, y si no nos las traía, pensabamos que podiamos encontrarla sin ayuda ajena
Y ahora no pregunto como en el parrafo anterior, ahora afirmo sin miedo a equivocarme , eso no es verdad y nos hemos contado una mentira garrafal,  porque cuado nos abrimos a escuchar adquirimos conciencia de nuestras propias limitaciones.
Aprendemos que nosotros mismos somos el mayor de los abstaculos con lo que tropezamos, que es inutil aprender a fueza de sinsabores, que el abrir poco a poco nuestra mente y empezar a confiar en los demás, aprendemos de ellos sin tener tener que repetir sus errores ... o a comprender los nuestros propios.
Eso para nada quiere decir que hemos dejado de aprender de nuestras propias experiencias sino que ahora somos "enseñables" y podemos aprender las lecciones que nos da la vida de una forma más rapida y efectiva.
La experiencia es una maestra dura que primero hace el examen y luego da las lecciones ,dice un refran anónimo, pero lo que no es anónimo es que al benefiarse de las experiencias ajenas se pueden aprender lecciones con el menor sufrimiento y yo diríaque con ninguno porque sería innesario el dolor sólo con saber escuchar y abrirse a los demás.
Y eso si que es un afortunado y gran beneficio.
Yo tengo la oreja dispuesta para oir todo lo que la vida tiene , todavía, para ofrecerme. Pero sobre todo las cosas quiero "escuchar" y seguir aprendiendo hasta el final de mi vida lo que los demás tienen para enseñarme .
Y vengan de dode vengan esa lecciones las escucharé con humildad ... aunque a veces me rebote.


MADRID 17 JULIO 2012



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