Muchos hablan como si su intención fuese que no pudiesen oirles, bien por que murmuran o porque hablan confusamente.
O por ambas cosas a la vez.
El caso es que no se les comprende o se les oye como el que oye llover.
Pero de verdad , y lo confirmo trás muchos años de experiencia en el futón, hay algunos que muestran de forma crudamente obvia que no tienen derecho a existir y encarnan la forma más extrema de la falta de autoafirmación... a no sér que mientan y se engañen a si mismos, que ese es otro cantar y se canta de otro modo y hoy mi "nota" nos es para los mentirosos, hoy no me dirijo a ellos ni a ellas.
Todos algunas veces decimos mentirijillas y quiero pensar que no las decimos con mala intención.
Cuando se trabaja con la psique de otros seres humanos, hay que ser muy cuidadoso para no latimar y mucho menos equivocar con nuestras propias percepciones que pueden diferir mucho de sus creencias personales o sus creencias religiosas y eso se consigue solo con saber respetar por encima de todo .Hay que ser mucho más que respetuosos y no confundir a nadie "implantando" ideas personales que como a cualquier ser humano nos pueden equivocar a nosotros mismos, cuando la única misión que debe imperar es la de sanar.
En terapia, cuando estos hombres y mujeres aprenden a moverse y a hablar con más seguridad, invariablemente nos informan - después de cierta ansiedad inicial - de un aumento de su calidad de vida. Un aumento del bien-pensar, mejor calidad de sentimientos y pensamientos y como colofón un aumento de la autoestima.
Pero no todas las manifestaciones de la falta de autoafirmación son obvias:
.-"Una vida normal se caracteriza por miles de silencios, entregas, claudicaciones y representaciones erroneas de sentimientos y creencias que no se recuerdan y que erosionan la dignidad y el respeto de uno mismo".-
(N. Branden.)
Cuando no nos expresamos a nosotros mismos, cuando no afirmamos nuestro ser, cuando no defendemos nuestros valores en los contextos en que es adecuado hacerlo, causamos heridas a nuestro sentido de la identidad personal y poco facil se lo podemos poner al psiquiatra o al psicólogo ni aún sabiendo muy bien lo se traen entre manos, de verdad, poco-facil.
No es el mundo ni el psiquiatra ni el psicologo ni el futón de un renacedor lo que nos daña, lo hacemos nosotros mismos si carecemos del suficiente valor para que no se nos "dirija".
Olvidando que un día yo pertenecí muy intensamente y comprometida a este grupo de personajes "raros" : psicólos, psiquiatras, terapias alternanivas o naturales , dentro y fuera e incluso proscritos de la medicina alópatica, yo también me he sentido inmersa en la voragine de "indicar" mis propias ideas , conviciones y creencias religiosas,
¡Es tan poco-facil ser ecuanime¡¡.
De alguna manera siempre se intenta plantar la propia semilla y uno se esfuerza en verla florecer como rosales del propio jardin.
¿Por el bién del paciente? ...
No poco esfuerzo me costó aprender que no.
No por el esfuerzo de verle sano y curado sino porque "otro" más se apresuraba , inconsciente, a engrosar "mis filas".
Sólo gadualmente constaté que no toleraba bien el desacuerdo y menos con mis pacientes ( o clientes) y les inducía de alguna manera a pensar, creer y "sentir" como yo.
¡¡Craso error¡¡
Un psicoterapeuta, sea del estilo que sea, no tiene ,porque no debe,es más ,debería estar prohibido por cualquier Colegio Profesional de estos "menesteres", dirigir a nadie, sino , y segun la formación y creencia religiosa del paciente, "comprender y entender" lo que sería lo mejor para él .
Para sanarle y en la medida de lo posible reintegrarle a una vida "normal".
(Un inciso:
¿Que és ser "normal"?.
¿"Adaptación", tal vez?,
Una pregunta:
¿Sería un buén "vino" de la mejor "cosecha"?
¡¡Hummnnn¡¡
¿Podría decrir que no?)
De ninguna manera niego la responsabilidad personal, pero en mi descargo puedo decir que nadie puede ser seducido sin su consentimiento a no ser que cuando lleguén a la consulta ya no haya nada que hacer y estén ya locos de remate .Pero eso es harina de otro costal ...y de la percepción sana y honesta de un "psi-deloquesea".
Se deberían derivar a "otra clase de profesionales" preparados para curar esos males que "ya" no tienen solución y no creerese semidioses o dioses totales diciendo "que eso lo arreglo yo" y prolongar las visitas del paciente indefinidamente . (Sin atreverme a pensar , ni a confesar que intención ,algunos amigos y compañeros de profesión se ofenderían ... y "eso" ni por un cortijo lo deseo, amo a mis migos piensen y crean lo que sea, con la condición de que a mi no me manipulen y me dejen seguir a "mi manera")
Más "uno" sabe lo que sabe lo que sabe y si no se sabe más es que hasta ahí se ha llegado y punto final. Se cierra el "kiosco" y vuelta a empezar. Nunca se puede dejar de aprender y menos cuando se "trabaja" con la psique de otros seres humanos teniendo la nuestra "pelín confusa" y descolocada.
Que bién podría ser ,¿O no?
¡A las pruebas me remito¡
Todos necesitamos ayuda, lo peor es no darnos cuenta de que la necesitamos.
.-"Sanador, antes de sanar a otros, sanate a ti mismo" (me dijo una vez un profe de la "Complu" utilizando una cita extraña para sus creencias pero no para las mias) - De no ser así, tu propia valoración y sobre todo tu propia eutoestima será la más perjudicada.".-
Con el tiempo fuí aprendiendo esa lección de inestimable valor.
Aprendí (con cientos de maestros de "aquí" y de "allá"),y sigo y seguire aprendiendo que hay que saber escuchar sin poner por delante mis propias creencias, que cualquier ser humano tiene las suyas y con esas son con las que se debe y se tiene que trababajar y no por ello olvidarse de las propias que pueden o no tener alguna que otra variación a traves de las experiencias que se van viviendo y no por ello sacrificar e inmolar el propio criterio.
Siempre hay ocasiones en que la "pleitesia" y la rendición de un "enfermo" nos adula y nos envanece pero hay que saltar por encima de ello e ir más allá. Hay que abrirse a las creencias de los pacientes, aunque algunos sean ateos sin remisión , ellos tambien creen en que no creen y son muy respetables sus sentimientos y pensamientos.
De veras se exije coraje y valor para tratar con otras ideas y creencias y acuar sin condicionamientos propios y personales con cualquier enfermo de este mal , eqivocada y confusamentamente llamado "mal mental" y no manipular sus creencias.
(Lo diga quén lo diga)
Si alguien visita el consultorio de un "psi", no es para que se cambien sus creencias sino para que se le ayude a verlas más claramente, sean las que sean, y ahí es cuando los "psi-deloquesea", tenemos que olvidar las propias y ni "inducir" ni "dirigir" pero si enseñar a que ellos sepan cuales son las suyas y apoyarse firmemente en ellas.
Y mientras tranto la misión de un "psi-deloquesea" tiene que ser (o debería) la de oir, callar ,escuchar y "sentir" lo que es lo mejor para sanar al paciente sin poner nada de la propia cosecha que , como dije antes , pueden variar según se vaya plantando nuestra vid para que florezcan nuevas uvas y nuevas experiencias.
.-"Ofrece siempre tu mejor vino y sabrán que tienes una buena bodega. Puede ser que varíe un poco la temperatura por el calor que pongas al mostrar abiertamente tus ideas pero que jamás se agriarán.Sólo así puedes dar lo mejor de ti misma, y aunque corrijas muchas veces, siempre sabrán que das lo mejor de tu cosecha".-
¡No he podido resirtime a esta "vanidad" con la que uno de mis "maestros" me obsequió un día ya muy lejano en el tiempo y siempre presente en mi corazón.
¡¡Vanitas Vanitatis¡ Si, pero nada me cuesta mostrarme y decir qué, quién y como soy, y aunque también pueda variar la "temperatura" en mis "cosechas" siempre contaré las verdades de mis experiencias.
(Gusten o no).
MADRID 18 ENERO 2013
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